Cuando alguien compra o a alguien le regalan nuestra artesanía quisiera que sintiera mucha alegría y que recordara un momento que lo cautiva o que lo conecta con otra persona.
Las artesanías son todo el valor cultural que hay en cada país y que nos representan a las regiones y las ciudades.
Llegué a esta labor hace muchos años, realmente ha sido lo que siempre he hecho desde que me gradué. Desde chiquita me gustó todo el tema artesanal y todas las manualidades. Encontré en estas chicas y en esas personas que me ayudan todo el tiempo, ese valor de lo hecho a mano, aprendí a valorar, me cautivé y enamoré de las flores, siempre en la capacidad de sorprenderme de su fragilidad con sus composiciones, texturas y colores desde entonces es lo que siempre he hecho.
Mi sueño con estas líneas es dar todo el valor del trabajo hecho a mano. En cuanto a las flores naturales es mostrar toda la exuberancia y riqueza de nuestro país. Colombia es el segundo exportador de flores en el mundo entonces siempre hemos querido llevar ese mensaje de alegría de maravillosidad de la naturaleza. En la línea de los tejidos, todo el valor que hay detrás de una pieza, las horas de trabajo, la paciencia, todo lo que significa tejer.
Nosotras soñamos y quisiéramos que nuestras piezas sean valoradas y atesoradas que realmente la gente encapsule un recuerdo o un momento especial. Nosotras siempre hemos pensado en mujeres sensibles, que se apasionan, y que vibran con la naturaleza. Entonces es llevarse esa pequeña cápsula y poder usarla y ser únicas, ser expresivas y espontáneas con algo muy sobrio pero especial.
Como empresa y como persona nos representan las flores naturales, son nuestras consentidas. Es la línea donde siempre ha estado nuestro corazón y nuestra pasión. Donde desde hace más de 10 años que trabajamos con las flores todavía somos capaces de verlas, enamorarnos y sorprendernos con sufragilidad con sus texturas, colores, con todo el tema del sembrado, de los cultivos y todo el proceso que hay detrás cuando las teñimos. Eso todavía nos emociona, entonces me encanta que todavía somos capaces de vibrar y creo que siempre será así, porque como se trata de algo natural y de artesanía hecha a mano, siempre tendrá el valor en nuestro corazón.
La línea de amuletos es una línea diseñada para llenar a las personas de significados y deseos. Es una línea en la cual muchas veces el significado está malentendido porque no es que una piedra como tal nos vaya a dar super poderes o significado si no que nosotros al usarlas somos los que las llenamos de significado. Por ejemplo, muchas veces queremos trabajar algún aspecto y esa pulsera es la que constantemente nos va a recordar ese trabajo. Entonces las piedras no son mágicas pero nosotros tenemos la capacidad de cargarlas y ellas nos van a acompañar.
El proceso de la línea de amuletos es sencillo. Nosotros empezamos con el diseño de la pulsera para darle el valor a lo que queremos expresar y darle toda la potencia y la fuerza al diseño. Diseñamos la etiqueta y en general el tema del amuleto,buscamos las piedras, los hilos y los dijes que nos van a acompañar y que van a caracterizar la pulsera. Ya después viene la parte del empaque, del etiquetado y el despacho. En este proceso, están involucradas 10 personas en mano de obra, en el taller fijo son seis personas pero hay muchas que trabajan desde la casa.
La línea de las flores naturales está creada para representar nuestra identidad como país. Estamos ubicados en la región de Antioquia en Colombia. Tradicionalmente nuestros ancestros han cultivado flores hace muchos años entonces es un homenaje a todas estas personas. Representa toda la alegría y el color de esta región.
Esta línea comienza en los cultivos de las flores donde están las personas encargadas del cuidado, de los abonos, de las podas y riegos. Luego toca la selección de las flores que vamos necesitando, muchas veces se separan por tamaños. El maquillador o la maquilladora se encarga de sacar las partes quemadas de la flor, para después pasar al teñido. Hay dos procesos de teñido; el de aspersión y el de inmersión. De ahí se pasa al proceso de inmortalización en el cual se puede durar de 15 a 20 días dependiendo del clima y del pH del suelo en el cual creció la flor. Después pasa al taller donde seleccionas o separas por parejas o combos, dependiendo del diseño que necesitemos. El recubrimiento es con diferentes materiales, puede ser plásticos o resinas. Estos materiales son utilizados principalmente para la protección del color, siempre teñimos con tinturas vegetales minerales, para tratar de ayudar al tema del medio ambiente y que el proceso no contamine mucho. Para la parte final del ensable generalmente usamos herrajes de latón con baños de oro o plata y con piedras adicionales que complementan los diseños.
En cuanto a la línea de tejidos, el valor que se le quiere dar es todo el trabajo hecho a mano, la paciencia y los diseños especializados que lleva.
En el diseño se ve la estructura del tejido, muchas veces llevan una secuencia entonces se coge el dibujo y los colores. En este proceso pueden estar más de 20 personas involucradas, es una línea mucho más demorada.
Como empresa creo que nos hace únicos amar este trabajo. Desde el principio en todos los diseños se ve y se transmite que todas las personas que están involucradas realmente les gusta su trabajo hecho a mano. Detrás del proceso, por más demora, soy paciente y procuro que siempre haya buena actitud. La actitud es de los valores que más rescato en todas las personas que están involucradas. Nos hacen únicos los colores, las composiciones, transmitir todo este valor colombiano detrás de cada pieza, en las flores transmitir toda esta fuerza, toda esta fragilidad, en los amuletos cada pieza está llena de significados que enamoran o que te atrapan. Los tejidos nos recuerda mucho alguna figura, alguna composición entonces lo podría resumir en el trabajo hecho a mano.
Para mi representar la identidad de Colombia significa llevar la alegría del país a muchos otros que podemos llegar por una pieza, que la gente compre nuestros productos y se sorprenda, que haya un momento de una risa o de una alegría.
El colombiano es muy alegre, muy trabajador, es pujante, yo lo podría resumir en que la mayoría estamos enamorados de la vida.
Es muy importante el legado cultural y todo el legado ancestral que hay detrás de todos estos procesos, no solamente el nuestro sino todo el tema de orfebrería y todo el trabajo hecho a mano del país porque precisamente lo estamos conservando, estamos invitando a las generaciones a que sean parte de los trabajos de sus familias, especialmente en nuestro proceso. Lo vemos mucho en los cultivos donde de pronto la gente invita a sus hijos y probablemente ellos van a continuar con el trabajo. En mi caso yo no tuve un referente de que mis papás trabajan en esto pero realmente desde pequeña me cautivó el tema y siempre he creído que desde que uno está joven puede inyectarle toda la alegría y el tema de innovación, conservar una técnica pero integrándole un valor de diseño y un valor de tendencia a lo que se está utilizando.
Cuando alguien compra o alguien que le regalan nuestra artesanía quisiera que sintiera mucha alegría y que recordara un momento que lo cautiva o que lo conecta con otra persona.
Para mi es muy importante ser parte de CLA. Rescato que se trabaje en comunidad, que las personas realmente veamos el valor de trabajo en equipo, el valor de trabajar por la artesanía, por lo hecho a mano, por los temas culturales de nuestros países, por sacar la bandera de cada país y cada región ante el mundo. Me siento muy feliz de ser parte de la comunidad y seque entre todos siempre seremos capaces de hacer mucho más. CLA es trabajo en equipo, es conexión, son contactos y es alegría.
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